El Consejo Superior de los Ulemas (teólogos musulmanes), presidido por el rey Mohamed VI de Marruecos, hizo pública hoy una ’fatwa’ (dictamen religioso) que establece que las mujeres pueden predicar pero no están habilitadas para ser imanes y oficiar la oración en las mezquitas.
El ministro marroquí de Asuntos Islámicos, Ahmed Taufiq, reclamó ayer, jueves, el dictamen de dicho consejo para zanjar una polémica que se había abierto en Marruecos después de la reciente graduación de las primeras 50 ’murchidates’ (predicadoras), a las que dentro de un año se sumarán otras 60 que han empezado ya el ciclo de formación.
El dictamen del Consejo Superior de los Ulemas señala que el rito malequita que se practica en Marruecos y la ’jurisprudencia islámica’ son ’unánimes al proscribir la dirección por la mujer de la oración de los hombres’.
Añade que nunca ha sido probado que a lo largo de la historia de Marruecos que una mujer ’haya dirigido en la mezquita la oración de los hombres o de las mujeres’.
La ’fatwa’ recuerda que la mujer, a diferencia de los hombres, debe recitar sus oraciones en voz baja.
El ministro de Asuntos Islámicos, que a principios de mes presidió la ceremonia de graduación y asignación de destino de las primeras mujeres predicadoras, declaró esta semana que las mujeres no podrán oficiar la oración en las mezquitas porque no podían asumir el papel del imán, reservado exclusivamente a los hombres.
Consideró que entre el papel del imán y de las predicadoras había ’puntos comunes’, como el de dar cursos religiosos, responder a las ’expectativas espirituales’ de los fieles, transmitir la ’Sharia’ (ley islámica) o ’preservar la identidad religiosa’.
Pero insistió en que ’la presidencia de las cinco oraciones diarias y la de los viernes (en la mezquita) sigue siendo una competencia de los imanes’ y recalcó que ’no hay ni habrá jamás mujeres imanes en este país’.
Taufiq pidió al Consejo Superior de los Ulemas que clarificase ’los preceptos de la ’Sharia’’ respecto a si las mujeres estaban habilitadas para oficiar la oración.