Las asociaciones advierten que la ley que prepara Interior favorece la expansión y el tráfico de la prostitución, ratifica las desigualdades entre sexos y legitima que se considere a la mujer como un objeto
Maricel Chavarría - BARCELONA/ La Vanguardia
Las principales organizaciones de mujeres de Catalunya y del resto del Estado se han dirigido en una carta al presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, solicitando que frene la iniciativa de reglamentación de la prostitución que promueve la consellera de Interior, Montserrat Tura, por considerarla, tal como está redactado el borrador, un modelo de actuación que no sólo favorece la expansión del tráfico de personas y de la prostitución, sino que ratifica modelos sociales de desigualdad entre sexos y legitima prácticas que tienden a considerar a la mujer como un objeto.
La Plataforma de Dones per l´Abolició de la Prostitució, el Lobby de Dones, Dones en Xarxa, Dones Juristes Themis, Dones Periodistes, Dones Progressistes... y organizaciones como la Red Feminista Contra la Violencia de Género advierten a Maragall que la regulación de la industria del sexo es "incompatible" e "inaceptable", y "representa per se un atentado contra los derechos humanos". Las firmantes piden al president que considere los efectos de una ley que, aseguran, abriría un camino sin retorno hacia la consolidación de una de las formas "más perversas y contemporáneas" de esclavitud de este siglo.
"Tanto el gobierno de Maragall como el de Zapatero desarrollan políticas de igualdad que tratan de posicionar a las mujeres con los mismos derechos y oportunidades que los varones, lo cual es difícil de compatibilizar si consideramos a la mujer un producto de consumo", alegó a este diario Ángeles Álvarez, de la Red Feminista contra la Violencia de Género. "El mensaje que les damos a las niñas es que son comprables, cuando debería ofrecérseles la perspectiva de ocupar el 50% de los puestos de poder y de que ninguna de ellas se venda por la calle".
"Es sorprendente que sea una conselleria regida por una mujer la que quiera llevar adelante un proyecto que atenta contra la dignidad de las personas y la posibilidad de una sociedad igualitaria", añadió Gemma Lienas, de Dones en Xarxa. "El imaginario colectivo absorbe esa idea romántica de la prostitución que proyectan la literatura y el cine; además, han aparecido en los medios prostitutas que dicen estar encantadas de serlo (y que son siempre las mismas), lo que refuerza la idea de que la prostitución está la mar de bien. No es cierto. Las mujeres capturadas por las redes no hablarán nunca en público, como tampoco las que han llegado a eso sin otra opción para mandar dinero a su país". "Cabría preguntarse - prosigue- hasta qué punto las mujeres que dicen no ver objeción en alquilar su cuerpo expresan ideas aprendidas, como tantas víctimas de violencia de género que en el juicio perdonan a su agresor. Leí en La Vanguardia a una prostituta que estima que, en definitiva, a todas se nos hacen regalos... tiene tan interiorizado que las mujeres somos objetos que nos ve así a todas. La ONU lo ve como una forma de violencia de género".
Lienas alega que el modelo abolicionista sueco "ha logrado reducir la prostitución, mientras que en Holanda ha aumentado un 25% en una década, y con ello el tráfico de niños y niñas". "Si somos iguales no podemos ser objetos comprables, y eso no es un problema de puritanismo, sino de ética. El sexo es una actividad fantástica y muy lúdica, pero de igual a igual. No se trata de puritanismo: montemos happenings,practiquemos el sexo todos en plena plaza Catalunya, pero sin pagar"