El parlamento iraní aprobó una ley que permite el aborto durante los primeros cuatro meses de embarazo, si la vida de la mujer está en peligro o si el feto es deforme.
El parlamento respaldó la ley que deberá ser aprobada por las autoridades eclesiásticas.
La legislación requiere que tanto el padre como la madre aprueben la operación, así como tres doctores.
Según los observadores, el parlamento se vio obligado a tomar medidas debido a que cada vez más mujeres iraníes recurren a abortistas clandestinos.
Los medios locales señalan que cada año se realizan al menos 80.000 operaciones ilegales, costosas y a menudo peligrosas.
La ley todavía tiene que ser aprobada por el Consejo de Guardianes, un comité de supervisión no elegido que revisa todas las leyes para ver si se ajustan a la legislación islámica.
Sin mujeres
La nueva medida fue aprobada por un poco más de la mitad de los miembros del parlamento dominado por conservadores.
Decenas de miles de mujeres se ven obligadas a recurrir a la clandestinidad, lo que llevó al cambio de la ley. No obstante, ninguna de las trece mujeres en la Cámara participaron en el debate.
Las reglas para permitir el aborto siguen siendo estrictas: incluso si una mujer quedase preñada como resultado de una violación no tiene derecho a escoger si tiene el bebé.
Según la ley existente, un aborstista ilegal y la mujer en cuestión pueden ser sentenciados a entre tres y diez años de cárcel.
Entre tanto, aumenta la preocupación por la falta de educación sexual, que podría ayudar a reducir este problema social.
Pero el foco hasta ahora ha estado en el debate religioso que busca tratar de definir el momento en el que el feto en el vientre de la madre desarrollada un alma, que -según algunos de los principales clérigos- sucede sólo después de cuatro semanas de gestación.
Fuente: BBCnoticias