PANAMÁ

Una mujer: Mireya Mososo, preside Panamá.

El primer país del mundo en permitir la incorporación voluntaria al sistema de seguro social de quienes se dedican al trabajo del hogar.
 
 
 
 
 
 

RECONOCEN LABOR DE AMAS DE CASA

Panamá, 27 de noviembre de 1999 (ACAN-EFE/El Universal/Tertulia). Panamá se convertirá próximamente en el primer país del mundo en permitir la incorporación voluntaria al sistema de seguro social de las personas que se dedican al trabajo del hogar, afirmó ayer la presidenta de la Comisión Legislativa de Asuntos de la Mujer, Teresita de Arias.

Ello será posible una vez que la presidenta de Panamá, Mireya Moscoso, sancione la ley que reforma el régimen de seguro voluntario de la Caja de Seguro Social (CSS) y reconoce la labor de las personas que se dedican al trabajo en el hogar, dijo a ACAN-EFE la legisladora.

Arias afirmó que este reconocimiento es una revolución en su concepto mismo. "Más importante que la gente pueda cotizar es el hecho de darle dignidad y reconocimiento a ese infravalorado oficio", aseguró.

El proyecto de ley, iniciativa de la legisladora, fue aprobado en tercer y último debate en la noche del miércoles pasado con el respaldo unánime del pleno.

A partir de ahora, la cotización mínima para este tipo de seguro voluntario pasará a ser de los 100 dólares mensuales planteados
originalmente a 300 dólares, cantidad en la que se establecerá el salario mínimo el próximo año, según los cálculos de la legisladora. En Panamá, el salario mínimo actual es de 224 dólares.

Las personas que se afilien a este régimen podrán aspirar a una pensión mínima de 175 dólares mensuales, al tiempo que tendrán derecho a las prestaciones de salud y económicas. Los riesgos profesionales quedarán al margen de la ley.
 
 

MIREYA MOSCOSO / PRESIDENTA DE PANAMA


 
 


              MARIA TRUJILLO

              EL MUNDO-2/10/99

              PANAMA.- Ser presidente y mujer, en Latinoamérica, no debe de ser labor fácil. Además de las obligaciones del cargo, existe una reticencia machista, que, en estos países, aún se hace sentir de manera patente. Mireya Moscoso, viuda de Arnulfo Arias (tres veces presidente de Panamá), parece no temer a esta circunstancia, y dedica su energía a la ardua labor que le espera durante su mandato de cinco años al frente de Panamá, una tarea que inició ayer, cuando asumió la Presidencia. Moscoso afronta un doble desafío: es la  primera mujer que gobierna este país y deberá administrar a partir del 31 de diciembre el Canal de         Panamá, cuando sea devuelto por Estados Unidos.

              - ¿Cómo va a lidiar con los compromisos que le ha dejado el Gobierno anterior?

              - Cuando, en 1994, ganó Pérez Balladares, el entonces presidente, Guillermo Endara, hizo una transición sumamente tranquila. Esta vez se han presentado obstáculos. Se han cambiado leyes para que, en ciertos puestos, ellos puedan seguir gobernando el país durante los cinco años de mi mandato.

              - Dicen que a usted le falta preparación académica y política. ¿Qué responde?

              - Que yo estuve durante 25 años al lado de un gran político al que debo todo lo que sé. Que también estuve en un college de EEUU. Que he dirigido un partido desde 1991. Que hemos ganado las elecciones. Que, por otra parte, tengo y dirijo una empresa cafetera muy importante en este país, y tengo un negocio de producción de energía. Si a pesar de todo esto se me         quiere llamar incapaz, creo que se debe al machismo que existe en Panamá, y en muchos otros lugares.

              - ¿Qué diferencias existen en el Panamá de hoy, comparándolo al Panamá de Arias?

              - Son dos épocas completamente distintas. En 1968 recuerdo a un presidente Arias profundamente preocupado, porque la deuda externa de Panamá era de 800 millones de dólares. Hoy en día la deuda externa de este país alcanza los 7.000 millones. Nos preocupa este endeudamiento, porque el Gobierno anterior no nos ha informado del monto exacto de la deuda.

              - ¿Cuál fue el momento en que decidió tirarse de cabeza en la política activa?

              - Después de morir mi esposo, pensé que ya me podía ir tranquila a mi casa, porque la política trae consigo muchos sinsabores. Cuando atacaban al doctor Arias, él siempre me decía: «Si tienes la conciencia tranquila, no importa lo que digan». Pero yo sufría mucho. Después de su muerte pensé: «Bueno, ya terminé con esto». Pero en 1990, se me pide que inscriba, nuevamente, el partido del doctor Arnulfo Arias, y en el 91 empecé a dirigirlo. Luego, en el 94, se me pidió que fuese candidata a la Presidencia. Yo me negué. Sin embargo, en el partido se me dijo: «Es usted, y no puede ser nadie más». Por eso en el 94 aspiré, por primera vez, a la Presidencia.

              - Parece ser contraria al liberalismo a ultranza, y al proceso de privatizaciones, sin una alternativa clara. ¿Dónde puede encontrar dicha alternativa?

              - Son cosas que deben evaluarse con cautela. La decisión final debe estar dictada por el interés exclusivo del pueblo.

              - ¿Cuáles son las ventajas reales de la entrega del canal para la economía de Panamá?

              - Con el canal, revierten a Panamá miles y miles de hectáreas de terreno. Ya tenemos empresas extranjeras, y nacionales, que quieren invertir allí.

              - Existe preocupación por la capacidad de Panamá de defender la neutralidad del canal en caso de conflicto bélico. También se teme la importante presencia de China en la economía de su país.

              - Sabemos que hay muchos inversionistas chinos en este país, y uno de los puertos más importantes se les ha concedido precisamente a ellos; esto provocó disgusto en EEUU. Pero son inversionistas que vienen a Panamá, igualmente podrían venir ellos, y las puertas se les han abierto para que lo hagan.

              - ¿Qué opina de la invasión de Panamá por EEUU en 1989?

              - Nadie la quería. Estados Unidos llegó, porque hay cláusulas en el tratado del canal que le permitían invadir a este país, y así lo hizo. Muchas veces veíamos a los panameños en la calle apoyando a los americanos que estaban en territorio nacional, porque pensaban que les estaban quitando de encima una dictadura que ya duraba 21 años. Después de esa invasión vino la democracia a Panamá. Gracias a esa democracia hemos tenido elecciones en el 94, y ahora en el 99. Pero no queremos una invasión, nuevamente, en Panamá.

              - ¿Piensa gobernar como la viuda de Arnulfo Arias, o como Mireya Moscoso?

              - Soy la viuda de Arnulfo Arias, he compartido y comparto sus ideales políticos, pero yo voy a gobernar como Mireya Moscoso, primera mujer elegida presidenta de Panamá.