MANIFIESTO DE LA COORDINADORA DE LA
MARCHA MUNDIAL DE LAS MUJERES DE GALICIA

¡¡NUNCA MÁS!!

Versión original en gallego
Traducción al castellano: María Reimóndez Meilán-Feminario Teorías da Diferencia

La Costa da Morte, de Soneira y de Bergantiños están teñidas de negro. Negras son también las lágrimas que mujeres y hombres de estas tierras y de todo el país tragamos de rabia e impotencia. Galicia está de luto.

La del Prestige es la crónica de una muerte anunciada. Una historia de muerte que se viene repitiendo cada cierto tiempo, inexorablemente. Una y otra vez se denuncia, de forma recurrente, pero ni las leyes ni quien legisla, ni quien tiene el poder para cambiarlo escuchan. Igual sucede con la violencia contra las mujeres.

Este es también un acto violento, una agresión, e igual que ocurre con la violencia contra las mujeres, es fruto de un sistema económico, político, social basado en la dominación y que se sustenta en el uso, abuso y expolio de los RECURSOS. Un sistema agresor que conduce a la desaparición y a la muerte de estos recursos: a la muerte de la tierra, del mar y de las mujeres. Ni las mujeres, ni la tierra, ni el mar somos patrimonio particular de nadie. No somos recursos inagotables de los que se pueda abusar una y otra vez impunemente porque lo que se está poniendo en peligro es el futuro, la vida misma. Caminamos hacia un sin sentido de guerra y violencia y es necesario cambiar de rumbo ya.

Nos han teñido el pan y las rosas de negro. Nos han contado mentiras y muchas. Historias, cuentos. Y en esta Nuestra Tierra hay tradición de cuentos. Pero los cuentos pueden ser muchos y de tipos muy diferentes.

En los medios de comunicación estos días hemos podido escuchar muchas de esas “historias” que podríamos clasificar en diversas tipologías:

a. Cuentos de desaparecidos. Aquellos protagonizados por el Gobierno gallego, con Don Manuel a la cabeza. Y aquí la historia resulta curiosa pues se ve claramente cómo los RESPONSABLES se afanan en buscar chivos expiatorios. Porque, ¿vosotras de quién pensáis que fue la culpa? ¿del capitán del barco? , ¿del armador?, ¿de Gibraltar? (es decir, del inglés), ¿del tiempo o de la mala suerte?

b. Cuentos de ausencias y esperas (como la de Penélope esperando a Ulises): aquí los protagonistas son los ausentes: los medios de prevención (remolcadores, barreras...), los medios técnicos de lucha contra la contaminación (¿quién debe limpiar?, ¿con qué?, ¿a dónde se lleva el material tóxico?). Todo el mundo espera a que vengan, excepto las autoridades que esperan por la diosa Fortuna, esta, por cierto, también desaparecida.

c. Historias de ahogados: ya lo decíamos antes, cada diez años, más o menos, se ahoga un barco que transporta materiales tóxicos y peligrosos cerca de nuestras costas pero, ante el gran negocio de las multinacionales, ¿quién no haría la vista gorda?

d. Historias de sirenas o, mejor dicho, de “cantos de sirenas”, promesas de “reestructuración” de nuestro sector pesquero y marisquero que no son otra cosa que su progresivo desmantelamiento. Aquí desaparece un problema muy embarazoso para nuestros gobernantes ya que el Prestige les ha hecho el trabajo sucio.
 

Y frente a estas macabras historias, están aquellas otras que, sobre todo a las mujeres, tendremos que inventar para hacer más llevadero el día a día, para ver si llegamos a fin de mes, para pagar hipotecas, impuestos y ver lo que pasa dentro de seis meses cuando se deje de cobrar la miseria ofrecida por Rajoy, si se cobra algún día. Porque puede que seamos buenas administradoras pero con los 40 euros prometidos, las cuentas no salen. Después de diez años se empieza ahora a cobrar las indemnizaciones por el Mar Egeo y todavía hoy no se han cobrado las que se concedieron hace dos años cuando el temporal obligó a tener amarrada la flota pesquera.

También tendremos que inventar historias para que nuestras hijas e hijos nacidos y por nacer conozcan los araos, los alcatraces, los cormoranes, las agujas, los chorlitejos y las agachadizas y otros tantos que, de paso o invernando en nuestras costas cayeron atrapados por el chapapote. Pasarán años hasta que formen poblaciones estables por aquí.

Esta es la historia de la TIERRA MADRE agredida y víctima una vez más, como lo son las mujeres a manos de un poder con rostro masculino. Y para responder a las agresiones no sólo tenemos las historias, la palabra, también tenemos la ACCIÓN.

Vamos a ser capaces de quitarle el negro chapapote al pan y a las rosas, de contruir FUTURO Y VIDA. Porque otro mundo sí es posible.